Hora de la siesta, aprovecho la pileta de la casa de mi suegra. Mi cuñada toma sol, mi media manzana lee bajo un pino, yo me remojo.
A lo lejos se oye algo agudo, un sonido emitido por algo vivo, mi media manzana se levanta, abre la puerta que comunica el patio con la cocina y grita:
- ¿ Qué pasa mamá, por qué gritas?
- ¿ Qué te pasa a vos? yo no dije nada. Dice Irma con una voz de siesta que aplasta
Risas...
- Todavía me pasa confundir los gritos de mamá con ladridos de chihuahua. Dice mi media manzana, con los ojos llorando de risa.
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5 comentarios:
jaja que ruidito infernal debe ser, no?
Jjajajja
dios, me hiciste reir muchísimo!
te mando saludos!
jajaja qué lindo
beso grande!
Me matan tus relatos!!!
Adoro a tu suegra: hace milanesas y tiene pileta!!!!
Quiero más, y empiezo a seguirte.
solitaria: No imagina!! juro que no imagina...
emiliana: La tragedia es asi de graciosa cuando se la relata. ;)
Melanie: gracias!
Agustin: gracias Agustin....Irma es asi, o se la adora o se la asesina!!!
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